Para obtener la preciada “Compostela”, debes realizar al menos los 100 últimos kilómetros a pie o a caballo, los últimos 200 km en bicicleta o 100 millas náuticas, terminando a pie el resto del Camino desde el puerto de desembarque. Los últimos 100 km deberán realizarse por cualquiera de las rutas reconocidas como oficiales, como el Camino Francés, y Sarria puede ser una etapa más en tu peregrinaje o el punto de partida hasta Santiago.
Los árboles nos permiten viajar. Viajar a través del tiempo, de la música, del transporte que utilizamos o de nuevas vidas que generamos.
Con solo observar los anillos de crecimiento de un árbol, podemos saber en qué año se produjo una sequía, si hubo un incendio o de qué lado sopla más el viento. Además, los árboles nos proporcionan madera para crear instrumentos, o para construir medios de transporte como barcos, bicicletas o las traviesas de las vías del tren.
Para que podamos continuar viajando ahora y en el futuro, la certificación forestal PEFC establece una serie de normas y controles que garantizan que los montes se gestionan adecuadamente y de forma responsable.
Árboles para viajar
A tu salida de Sarria, debes cruzar a Ponte da Áspera, del siglo XVIII. Al cruzar el puente, tu trayecto seguirá paralelo a la vía del tren a lo largo de 1 km aproximadamente. Es en este punto donde queremos hablar de la importancia de los árboles, también en los medios de transporte, en este caso, el ferrocarril.
El 1 de enero de 2021 se inició el Año Europeo del Ferrocarril, una iniciativa de la Comisión Europea destinada a destacar los beneficios del ferrocarril como medio de transporte sostenible, inteligente y seguro, a fin de fomentar su uso, tanto por los ciudadanos como por las empresas, y contribuir al objetivo del Pacto Verde Europeo de alcanzar la neutralidad climática de aquí a 2050.
En la Unión Europea, el ferrocarril es responsable de menos del 0,5 % de las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas al transporte, es decir, se trata de una de las formas más sostenibles y seguras de transporte de pasajeros y mercancías. A pesar de estas ventajas, solo el 7 % de los pasajeros y el 11 % de las mercancías, aproximadamente, viajan en ferrocarril, por ello, desde la UE quieren impulsar este medio de transporte y conseguir un espacio ferroviario europeo único, más eficiente y con una movilidad transfronteriza ininterrumpida.
¿Te has fijado por donde circula el tren?
En las vías férreas, verás unos elementos transversales de la vía que soportan los carriles, controlan el ancho de vía y transmiten las cargas del carril al balasto, son las traviesas. Las traviesas se fabrican principalmente de madera o de hormigón pretensado (bibloque o monobloque).
Pero como no podría ser de otra manera, hablaremos en este caso de las traviesas de madera, ya que la madera es un material renovable, reutilizable y reciclable, a diferencia del hormigón.
La madera para la fabricación de traviesas debe cumplir con una serie de requisitos y características, como proceder de árboles vivos, sanos, de buena calidad y de fibras rectas, duras y compactas.
Las maderas utilizadas generalmente son de roble, pino, haya u otras tropicales como Akoga.
El fabricante debe realizar todos los estudios y ensayos que puedan ser necesarios para garantizar la resistencia y durabilidad del material durante su vida útil, verificando su resistencia a factores como la temperatura, el agua, los hidrocarburos o cualquier otro agente químico que pueda estar presente en las infraestructuras. Además, el fabricante debe emitir para cada lote de producción, una declaración responsable de la especie y procedencia de la madera y garantizar su trazabilidad durante el proceso productivo. Las traviesas se marcarán de forma permanente con información para su trazabilidad.
En España, como en el resto de países europeos, las traviesas además de los requisitos técnicos, deben cumplir con los requisitos de legalidad de la madera. Las traviesas deberán ser acordes con la normativa aplicable en materia de medio ambiente y de comercialización de la madera, en particular, con los requisitos establecidos en el Real Decreto 1088/2015, de 4 de diciembre, para asegurar la legalidad de la comercialización de madera y productos de la madera.
En consecuencia, las traviesas de madera que lo requieran y que procedan de un país con Acuerdo Voluntario de Asociación en vigor contarán con una licencia FLEGT expedida por el país de origen, según el Reglamento del Consejo (CE) 2173/2005 relativo al establecimiento de un sistema de licencias FLEGT para las importaciones de madera en la Comunidad Europea.
De forma general, para toda la madera que se comercialice por primera vez en el mercado interior será de aplicación el Reglamento (UE) 995/2010 del Parlamento Europeo y del Consejo, por el que se establecen las obligaciones de los agentes que comercializan madera y productos de la madera, el Reglamento EUTR. En este sentido, en el caso de que el fabricante o suministrador de la materia prima actúe como agente EUTR, se deberá disponer y aplicar un sistema de diligencia debida, así como presentar la declaración responsable ante las autoridades competentes.
La traviesa de madera, cada vez está viendo más reducida su utilización, aunque todavía es empleada en numerosos casos donde sus cualidades la hacen necesaria, como desvíos, puentes, sustituciones, vías secundarias, estaciones, etc.
Algunas traviesas son tratadas con creosata, tratamiento que se le da a la madera expuesta al aire libre y enterrada para evitar el ataque de los hongos y bacterias en algunas maderas, y que actualmente está en entre dicho debido a su toxicidad. La Unión Europea comenzó a establecer limitaciones en el comercio y uso de la creosota, empleándose actualmente con unas determinadas especificidades y para aquellos usos en los que no exista contacto frecuente con la piel. Los usos industriales actuales de la madera tratada con creosota, como son traviesas de ferrocarril, postes eléctricos y telefonía, fines agrícolas, puertos y vías navegables no plantean ningún tipo de problema sanitario, al no estar en contacto con la población. Una parte significativa de los usos actuales de la madera tratada con creosota, es su reutilización para usos paisajísticos y ornamentales.
La traviesa de madera posee cualidades indiscutibles y complementarias frente a las características de la traviesa de hormigón. Por su origen sostenible y en muchos casos km 0, como materia prima renovable, por sus cualidades de elasticidad y resistencia, por su poco peso que ayuda a su instalación, por su buen comportamiento en caso de descarrilamiento, o por ser un producto económico desde un punto de vista energético, tanto para la producción como desde el punto de vista de su transporte, o por su posible reutilización y por supuesto como sumidero de CO2.
La investigación es fundamental para mejorar o innovar con nuevos tratamientos que no ofrezcan dudas sobre su utilización de la madera y seguir disfrutando de todos los beneficios que aporta en lugar de otros menos amigables con el planeta.
En Galicia contamos con empresas forestales certificadas PEFC como MADERAS TORREIRA, S.L. de Agolada (Pontevedra), que son especialistas en fabricación de traviesas para ferrocarril.
Fabrican traviesas tanto para vía ancha como para vía estrecha. Principalmente, realizan traviesas de madera de roble, aunque también pueden fabricar bajo demanda en madera de pino y en madera de akoga. Sus clientes pueden adquirirlas sin tratamiento alguno o bien tratadas con creosota. También pueden realizar distintas mecanizaciones: cajeadas, barrenadas, zunchadas, chapeadas con sistema gang-nail, etc.
Fuente: Maderas Torreira, S.L.
Un Nuevo Viaje. Reutilización de la Madera
Cada vez más, las traviesas de madera de las vías férreas son sustituidas por hormigón, pero a pesar de esto, la madera es un material que podemos reutilizar. Por ello, muchas de las traviesas retiradas de las vías del tren, encuentran una segunda vida en jardines, vallados, muros de contención…, cualquier uso que se pueda dar en exteriores. No debe ser utilizado en interiores debido al tratamiento aplicado para la protección de la madera expuesta a la intemperie.
Existen traviesas que pueden tener hasta medio siglo de vida, y además de mantener en la mayoría de los casos perfecta su forma, estructura y cualidades físicas, con su nuevo uso, continuamos almacenando el CO2 capturado por esa madera.
Fuente: Maderas Torreira, S.L.
En Maderas Torreira, S.L., empresa gallega que cuenta con certificado de cadena de custodia PEFC, y que su actividad principal es producir traviesas para vías ferroviarias, también cuentan con stock de traviesas de madera para uso en jardinería o cierres. Con diferentes medidas y opciones de traviesas de roble. Gracias a la dureza y funcionalidad de la madera natural, ofrecen un aspecto y rusticidad que las hacen ideales para jardinería.
Fuente: Maderas Torreira, S.L.
Árboles que dan música. Luthiers
Antonio Fernández López, empresario, Paulino Pérez Sánchez, luthier, Avelino Pousa Antelo, intelectual, Xermán Arias, luthier, ¿cuál es su historia en común?
La Granja de Barreiros (Sarria), fundada en el año 39 por el lucense, empresario y filántropo, Antonio Fernández López, fue un proyecto pionero de Educación Ambiental en Galicia, con el fin de ser un modelo que pudiese mejorar y modernizar las técnicas agrarias utilizadas hasta el momento. Posteriormente, se crea en 1948 la Escuela Primaria de Orientación Agrícola de la Granja de Barreiros, entre cuyas actividades incluía la organización de cursos de Formación para Maestros con la finalidad de proteger la cultura rural gallega, modernizar el campo y el patrimonio rural gallego. El modelo pedagógico, centrado en los ciclos de la naturaleza, científico, de coeducación, de enseñanza globalizada y personalizada, natural, experimental y experiencial. Como apoyo didáctico, Antonio Fernández López, promovió la creación de huertos escolares en las Escuelas Públicas de la provincia.
La Escuela Agrícola de la Granja Barreiros fue dirigida por el intelectual Avelino Pousa Antelo, profesor de formación, miembro de las Mocedades Galeguistas, presidente de la Fundación Castelao o presidente de honor de la Fundación do Pedrón de Ouro, entre otras muchas facetas.
A 5 minutos de la Escuela de Barreiros, en 1907 nace Paulino Pérez en el lugar de Vilei, en pleno Camino Francés. Paulino comienza a tocar el bombo desde los diez años en el cuarteto que dirige su tío y luego la gaita. A los catorce construye su primer instrumento y las herramientas de las que se vale, aunque no es hasta un poco más tarde cuando se centra en esta artesanía.
Será más tarde, cuando Avelino Pousa Antelo, le ofrece a Paulino celebrar un pequeño concierto, conociendo en ese momento al que será su mecenas, Antonio Fernández López.
El hijo de Antón de Marcos, destacado empresario sarriense, le encarga la construcción de unas gaitas para un grupo de niños y también que les enseñe a tocarlas.
A partir de esos interesantes encuentros, vendrá la creación del taller de gaitas y zanfonas de la Deputación de Lugo, en el año 1951, bajo la dirección de Faustino Santalices.
En 1954 Paulino viaja a Madrid, becado por Antonio Fernández, para aprender de un afamado constructor de guitarras.
Su hijo Xesús y su nieto Luciano Pérez continuaron la labor de este artesano cuyo número total de gaitas construidas se sitúa entre las dos y dos mil quinientas.
Imagen en Triacastela
En el taller de instrumentos musicales de la Diputación lucense, comienza su formación Xermán Arias (Vilei, 1965), aprendiendo el oficio durante ocho años, bajo la dirección de Xesús y Luciano Pérez.
En 1994, Xermán funda su primer taller y viaja a Francia para formarse con el luthier galo Christian Roult. Con él se especializó en la fabricación de violines, violas, violonchelos y zanfonas.
Xermán Arias o Xermán Luthier, cuenta con taller y domicilio en Sarria, abriendo sus puertas a músicos y convirtiendo su casa en un lugar de tertulias. Arxemil Lutheria es como se conoce a su establecimiento, donde se fabrican instrumentos para profesores y alumnos de conservatorios, músicos de las dos orquestas gallegas y de la nacional y muchos más, siendo el mundo de la música clásica de proceden la mayoría de sus encargos.
Pero, ¿de qué están hechos estos instrumentos?
Según cuenta Xermán en varias entrevistas, la clave de un buen instrumento está en la madera y en el equilibrio, que funcione bien en todos los registros. Para conseguirlo, hay que saber elegir la materia prima. Aunque para la elaboración de estos instrumentos es necesaria la importación de madera como arce, abeto o ébano, en Galicia se elaboran otros muchos intrumentos tradionales como la pandereta, para los que se emplean maderas locales como pino, fresno, cerezo o nogal. La madera está presente en música tradicional y moderna, en todos sus estilos, desde un tamboril a una guitarra o desde una flauta a un violín.
Lutieres del Centro de Artesanía e Deseño de Lugo hicieron realidad la reproducción de siete instrumentos que aparecen en el Pórtico da Gloria empleados desde inicios del siglo XII hasta finales del XIII. Xermán Arias, participó en la reconstrucción dichos instrumentos que fueron presentados a través de una muestra itinerante «A memoria do son» que recibió miles de visitas.
¿Qué ver?
Sin tener en cuenta la ciudad de Santiago, Sarria es la localidad más grande del Camino Francés, que puede considerarse una pequeña ciudad, con dos zonas diferenciadas, una moderna, actual donde podrás disfrutar de un paseo peatonal a orillas del río Sarria, el Paseo do Malecón, y una preciosa zona antigua a la que podrás acceder, entre otros, por la Escaleira da Fonte, de mediados del siglo XIX. Muy cerquita de allí te encontrarás con la iglesia de Santa Mariña.
Otros puntos de interés de Sarria, son la iglesia del Salvador, o el convento de A Magdanela, rodeado de arbolado.
En la parte más alta de la villa, puedes observar la Torre Fortaleza, conocida vulgarmente como “Torre do Batallón”. La torre de unos 15 metros, es el testigo de lo que un día fue una fortaleza que defendía el Camino de Santiago y la comarca de Sarria. la visita a los restos no está permitida, ya que actualmente se trata de una propiedad privada.
Sarria ofrece variados espacios verdes y áreas recreativas, tanto en zonas urbanas como naturales, tratándose principalmente de entornos ligados a los ríos que discurren por el concello.
Puedes realizar varias rutas de senderismo, entre ellas, la Ruta de A Foz das Aceas. Caminarás por los márgenes del río Sarria a través de una ruta circular de 6 quilómetros, rodeado de abedules, fresnos, alisos, sauces, castaños, robles, y muchos más! Puedes descubir en esta ruta una enorme riqueza natural con gran número de especies de flora y fauna. Molinos, puentes de madera o una cascada, son otros elementos de la ruta junto con distintos paneles informativos a lo largo del trayecto.
El Papel de PEFC
El aprovechamiento y el comercio internacional de la madera tienen dos niveles de exigencia, la legalidad y la sostenibilidad.
Gobiernos de todo el mundo impulsaron una legislación diseñada para garantizar el comercio de madera legal y rechazar la entrada en el mercado de productos forestales de origen ilegal. Algunas de estas regulaciones son el Reglamento Europeo de la Madera (EUTR) y la Ley Lacey de Estados Unidos. La certificación de Cadena de Custodia PEFC está diseñada para permitir demostrar el cumplimiento de estos requisitos normativos.
PEFC exige a través de su Norma de Cadena de Custodia, que las organizaciones apliquen un Sistema de Diligencia Debida (SDD) con el fin de ayudar a asegurar que sus actividades se ajustan a toda la legislación aplicable en materia de legalidad de la madera, incluyendo las leyes comerciales y aduaneras, y para minimizar el riesgo de que el material forestal y arbóreo adquirido provenga de fuentes conflictivas. Con el SDD se establece un marco de procedimientos y medidas, recopilación de información, evaluación del riesgo y su mitigación.
La certificación forestal PEFC es garantía de la legalidad y sostenibilidad del aprovechamiento de madera y de cualquier otro producto forestal.
